miércoles, 14 de noviembre de 2018

Tarta de Frambuesas


El otro día cuando fui al supermercado al pasar por la sección de la fruta vi unas frambuesas naturales y frescas, que me llamaron la atención. No puede resistirme a ellas y las compré.

De camino a casa empecé a darle vueltas a la cabeza, para decidir con que podría combinarlas de manera que no las horneara ni las cocinara de ningún tipo.

Hay postres en los que unas frambuesas congeladas son estupendas, lucen y saben deliciosas igual que si fueran frescas. Pero al disponer de estas frutitas frescas, necesitaba algo que luciera y así lo hice.

Además, hice la crema pastelera en el micro. Era la primera vez que me aventuraba a hacerla así, y salio genial.

Esta tarta de frambuesas es deliciosa, con base de hojaldre crujiente, una crema pastelera con el dulzor justo que combina perfectamente con la acidez moderada de las frambuesas frescas.

¿Qué se necesita?
- Masa Redonda de Hojaldre 
- Un Poco de Mantequilla Para Engrasar
- 250 ml de Leche Entera
- 1/2 Cucharadita de Pasta de Vainilla
- 20 g de Harina de Maíz
- 55 g de Yemas de Huevo
- 65 g de Azúcar
- 15 g de Mantequilla
- 200 g de Frambuesas Frescas
- Un poco de Azúcar Glacé

Precalentamos el horno a 200°C.

Buscamos un molde de unos 19 cm de diámetro.

Extendemos la plancha de masa hojaldre sobre una superficie plana.

Como probablemente sea bastante más grande que el molde, pondremos sobre el centro de la masa el molde y marcaremos unos 3 cm aproximadamente de masa que salga de la base del molde.

Recortaremos con ayuda de un cuchillo bien afilado el aro de masa de hojaldre que nos sobrará.

Lo reservaremos plastificado en la nevera, para usarlo en palitos de hojaldre con queso mismamente.

Engrasamos el molde y colocamos una base de papel de horno en el.

Sobre esa base colocamos la masa de hojaldre.

Si hemos hecho bien el corte conseguiremos cubrir la base del molde y la masa subirá un poco por los lados.

Pinchamos la base con un tenedor y la cubrimos con papel de horno.

Encima de ese papel de horno, echamos unas judías o garbanzos secos para que hagan peso.

Metemos el hojaldre al horno unos 15 minutos.

Al pasar ese tiempo, sacamos el molde con el hojaldre, le quitamos el papel con el peso, con cuidado de no quemarnos.

Volvemos a meter el molde en el horno para que termine de hacerse el hojaldre, 5 minutos.

Después de ese tiempo, sacamos el molde con el hojaldre del horno.

Lo dejamos enfriar un poco, antes de desmoldar con cuidado la base, para que no se rompa.

Ahora empezamos con la crema pastelera en el microondas.

En un cuenco amplio, vertemos la leche fría, la pasta de vainilla, la harina de maíz, las yemas y el azúcar.

Con unas varillas batimos bien la mezcla para que quede bien diluido todo.

Metemos el cuenco en el microondas a 750 w durante 2 minutos.

A los dos minutos removemos la mezcla del cuenco.

Volvemos a poner el microondas otros 2 minutos.

Al terminar ese tiempo volvemos a ligar la crema, y así volvemos a calentar la crema por intervalos de 2 en 2 minutos hasta que se cumplan en total 10 minutos desde la primera vez que lo metimos en el microondas.

Al pasar esos 10 minutos, mezclamos bien la crema pastelera con las varillas.

Añadimos la mantequilla y pasamos la crema por un colador para que quede más fina.

Metemos la crema pastelera directamente en una manga de pastelería, bien cerrada y la dejamos enfriar.

Una vez fría la base de hojaldre, la rellenamos con la crema pastelera ya fría con ayuda de la manga pastelera.

Ya sólo nos queda colocar las frambuesas encima hasta cubrir toda la crema.

Por último, la decoramos espolvoreando un poco de azúcar glacé sobre la tarta.

¡A disfrutar!

viernes, 9 de noviembre de 2018

Patatas Guisadas con Sepia


Aunque estemos en otoño todavía, aquí pasamos de la manga corta, al abrigo y las botas en un pis pas.

Después de sacar a la carrera la ropa de invierno y guardar toda la ropa de verano, para intentar evitar un constipado. Cosa que no hemos conseguido, por cierto. He ido preparando comidas calentitas para estos días. 

Estas patatas guisadas con sepia están buenísimas y se agradecen un montón con las temperaturas y la lluvia que tenemos últimamente.

¿Qué se necesita?
- 1 Cebolla
- 700 g de Sepia
- 1 Hoja de Laurel
- 1 Vasito de Jerez
- 450 g de Tomates 
- 800 g de Patatas
- Agua
- 2 Ajos
- Perejil Picado
- Aceite de Oliva Virgen Extra

Para unas 5 personas.

Preparamos los ingredientes que vamos a necesitar.

Pelamos la cebolla, la cortamos en trocitos y la reservamos.

Pelamos los tomates, los troceamos en gajos y los ponemos en un cuenco aparte.

Pelamos las patatas y las dejamos aparte.

Cortamos la sepia en trozos medianos y la reservamos.

Ponemos en una cacerola grande un poco de aceite de oliva Virgen Extra y la ponemos a calentar.

Añadimos la cebolla y la dejamos pochar para que se dore.

Incorporamos la sepia y la dejamos que se tueste un poco.

Ponemos una hoja de laurel en el guiso y añadimos el jerez.

Dejamos que hierva todo unos 5 minutos.

Añadimos los tomates.

Troceamos las patatas de manera que el cuchillo no llegue al final del corte, sino que casi al final se fuerza de manera que se romperá en trozos. Y los metemos en la cacerola también.

Removemos y cubrimos con agua.

Dejamos que hierva todo junto durante unos 20 minutos.

Antes de llegar a los 20 minutos, en un mortero, majamos dos ajos con sal.

Incorporamos el majado a las patatas guisadas junto con un poco de perejil picado.

Dejamos que hierva todo unos 5 minutos hasta que tanto las patatas como la sepia estén blandas.

¡A comer!

jueves, 1 de noviembre de 2018

Galletas Rellenas de Halloween


Happy Halloween!

Mis niños llegaron a casa con la alegria de que era Halloween y entre que me disfrazo, que hago galletas, que me las como...

Vamos que se nos paso la tarde con extraescolares incluidas en un pis pas.

Estas galletas de Halloween son geniales por que mis niños disfrutaron haciendolas y decorandolas por que ellos las decoraron con todos los adornos comestibles que teníamos, por supuesto. 

Aunque lo bueno esta en el sabor y que cada uno les puede dar su toque personal con  su relleno preferido.

¿Qué se necesita?
- 175 g de Mantequilla en Pomada
- 75 g de Azúcar 
- 16 g de Azúcar Avainillado
- 1 Limón Rallado
- 1 Huevo 
- 300 g de Harina
- Pizca de Sal
- Mermelada al Gusto

Primero batimos la mantequilla hasta que sea cremosa.

Añadimos los dos tipos de azúcar hasta que quede una mezcla homogénea.

Incorporamos la ralladura del limón y mezclamos.

Añadimos el huevo y batimos todo junto.

Tamizamos a parte la harina junto con la sal y vamos incorporando la harina en tres veces.

Hasta que no se haya incorporado bien una parte de harina a la mezcla no incorporamos otra. 

Ya esta lista la masa.

Extendemos sobre una superficie plana una capa de film transparente.

Vertemos la masa de galletas encima del film y lo cubrimos con otra capa de film transparente.

Si podemos intentaremos formar una lámina de unos 5 o 6 mm de grosor con ayuda de un rodillo.

Ahora, metemos la plancha de masa de galletas en la nevera para que se endurezca de 30 a 60 minutos.

Una vez dura la masa la sacamos y con ayuda de cortapastas o de un cuchillo afilado hacemos las formas deseadas.

Colocar las galletas formadas sobre papel de horno y sobre una bandeja para horno.

Además, separarlas un poco entre ellas.

Si se quieren hacer las galletas rellenas y que se vea a traves de los agujeros,  necesitamos dos galletas emparejadas. Una con agujeros y otra sin ellos.

Metemos las galletas sobre su bandeja de horno en la nevera para que se enfrien, endurezcan y  no pierdan la forma. Unos 20 minutos.

Mientras, ponemos a precalentar el horno a 180°C.

Una vez endurecidas las galletas, sacamos las bandejas de horno de la nevera.

Meter al horno unos 10 o 15 minutos dependiendo del tamaño de la galleta.

Es importante que no se doren, como mucho una pizca por el reborde de abajo.

La bandeja la sacamos del horno, pero dejamos la galleta reposando sobre ella.

Una vez enfriada la galleta, la podemos dejar reposar sobre una rejilla.

Cuando estén todas frias rellenamos cada pareja con mermelada del sabor que prefiramos por dentro.

Yo las rellene de mermelada de ciruela negra para los fantasmas y de cereza para las calabazas. :)

Ya sólo nos queda disfrutarlas.