A veces surgen excursiones en el último momento o visitas que no tenías previstas o simplemente apetece algo dulce sin demasiadas complicaciones.
Estos Bocados Dulces, son muy rápidos de preparar, sirven para ir de excursión, para la merienda de los peques o para la sobremesa con el café.
En resumidas cuentas, te sacan de un apuro y te solucionan la vida.
Si tienes unos buenos ayudantes, como me pasa a mi, dispuestos a meterse en faena en menos que canta un gallo, ni te creerás lo poco que se tarda en hacer. ¡Más manos, más diversión y menos tiempo en tenerlos listos! ;)
¿Que se necesita?
- 1 Plancha de Hojaldre Rectangular 260g
- Tableta de 200 g de Chocolate
- 1 Huevo
- Almendra en Cubitos o en Polvo
Precalentamos el horno a 200°C.
Extendemos la masa de hojaldre sobre una superficie plana.
Medimos la masa para dividirla por la mitad horizontal con un cuchillo bien afilado.
De esta manera tenemos dos rectángulo, largos y estrechos.
Con el mismo cuchillo vamos haciendo cortes oblicuos de arriba hasta abajo empezando por una de las esquinas, formando triángulos no demasiado anchos, en cada rectángulo.
En cada rectángulo saldrán varios triángulos y dos medios triángulos en los laterales, todos nos sirven.
En cada triángulo entero ponemos en la base del triángulo un trozo de chocolate de 10 g.
En la base de cada medio triángulo ponemos un pedazo de chocolate de 5g.
Ahora solo hay que enrollar desde la base hasta la punta de manera que la punta termine bajo todo el croissant.
Colocar sobre una bandeja de horno, papel de horno y sobre el los minicroissants.
Batir el huevo y barnizarlos.
Espolvorear sobre algunos almendra en cubitos o en polvo.
Meter al horno con ventilador unos 7 minutos. Si el horno no tiene ventilador necesitarán unos minutos más, hasta que hayan crecido y se hayan dorado.
Sacar del horno y dejar reposar hasta que se enfríen sobre una rejilla.
¡Espero que los probéis!
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